Sandra Romo

Jueves, 6 de julio de 2017

Los tendones están recubiertos por vainas que contienen líquido sinovial con el fin de ayudar a que los tendones se mantengan en su lugar, reduciendo la fricción durante el movimiento y en algunos casos sirviendo como poleas. Dentro de las tendinopatías, se llaman tenosinovitis, las que involucran tanto a las vainas como a los tendones. Este es el caso del la tenosinovitis estenosante de Quervain o Síndrome de Quervain, donde ocurre una inflamación que produce disminución del espacio del canal situado en la muñeca (la llamada tabaquera anatómica, donde comienza el pulgar a nivel de la mano) por el que discurren los tendones del abductor largo y extensor corto del pulgar.

Existen dos mecanismos de producción para esta afección y los músicos deben estar prevenidos por su alta frecuencia de aparición:

  1. Mecanismo estático: Empleo continuo de fuerzas de pinza entre el índice y el pulgar, con poca o nula movilidad en la articulación trapeciometacarpiana o radiocarpiana.
  2. Mecanismo dinámico: Movilidad repetitiva de abducción y extensión de las articulaciones trapeciometacarpiana o radiocarpiana.

El tratamiento principal es tratar la causa. Pues en músicos, opciones quirúrgicas, infiltraciones y medicamentos como los AINES (antiflamatorios no esteroideos) van a disfrazar el síntoma sin corregir la causa. A través de medios físicos, como láser, termoterapia (calor), crioterapia (frío), terapia de contrastes, masaje, ejercicios específicos, algunas veces férula o kinesiotape, entre otros, podemos disminuir el dolor y devolver la funcionalidad al pulgar y a la muñeca.

Tratando la causa, ¿reposo, dinamismo o ambas?

Aquí abordamos los dos mecanismos de producción del Síndrome. Pregúntate si tus pulgares son dinámicos o son estáticos al tocar tu instrumento y qué partes de tu pulgar son estáticas y cuáles dinámicas. Observa detenidamente tu pulgar, e intenta moverlo desde poco arriba de la muñeca (la articulación del carpo con el metacarpo a este nivel se llama trapeciometacarpiana), y si te das cuenta, esta articulación tiene mucho movimiento y es a través de este movimiento que se nutre tu pulgar. Usualmente en músicos, es una articulación muy castigada referente al movimiento, por ejemplo en la mayoría de los instrumentos de viento, al sostenerlos para tocarlos, al hacer la pinza en el brazo de instrumentos de cuerda (el lado izquierdo si son diestros); también durante el “grip”en percusionistas y bateristas, la participación del pulgar es ante todo, de pinza. ¿Qué ocurre cuándo detienes una plumilla o una baqueta? ¿es que las articulaciones de tu pulgar se mueven, o unas si y otras no?. Es importante que incluyas un buen calentamiento a todo el pulgar (iniciando desde la mano) por si acaso tus pulgares tienden a ser muy estáticos. En pianistas y percusionistas, nos ocupa el ejemplo del dinamismo, por exceso de repetición de movimientos de abducción es decir, separación, por ejemplo durante las octavas, y la extensión, que ocurre para poder realizar la subsecuente flexión al percutir la tecla, por lo que hay que cuidar no dejarle solo la carga a pulgar, y permitir la participación de la muñeca, así como el peso de todo el brazo favorecido por la gravedad.

En conclusión, como músico consciente, y para prevenir esta tenosinovitis, te recomiendo cambios de hábitos (ver artículo tendinitis), regular en tono muscular (próximo artículo) y el reposo o dinamismo (según sea el caso) pues son mucho más efectivos.